Hoy quiero confesar. . . que mi marido es el Rey

Hoy quiero confesar… que nunca he pecado de pesimista, siempre he mirado al futuro con hambre de ?xito y sin miedo a crecer, elimin? las barreras para que la ?nica limitaci?n en mi vida fuera yo mismo, ?qu? ocurri?? Que lo ?nico que pod?a cambiar lo hizo, convert? mi sonrisa p?cara y tierna en un semblante serio, sustitu? la amistad por una intimidad reservada, el coraz?n que antes compart?a ahora era solamente m?o. Siempre cre? que la sangre azul de aquellos que compartieran mi lecho, conseguir?a transportarme a un mundo de cuento, que la sonrisa se convertir?a en la eterna compa?era de mi vida cuando fuera capaz de decir en p?blico y a viva voz… que mi marido era el mism?simo Rey. Te invito a descubrir qu? fue lo que me sucedi?.